Transportar obras de arte es una tarea que requiere precisión, cuidado y un profundo conocimiento de los materiales y técnicas de embalaje. En EnviArte, sabemos que cada obra de arte es única y que protegerla durante su envío es tan importante como la obra misma. Ya sea un cuadro de gran formato, una escultura delicada o una instalación contemporánea, aplicamos métodos especializados para minimizar cualquier riesgo.
A continuación, te explicamos los pasos clave que seguimos para asegurarnos de que tu obra viaje segura, intacta y llegue en las mismas condiciones en las que partió.
- Evaluación personalizada de la obra
Antes de preparar cualquier envío, realizamos una evaluación exhaustiva de la obra. Esta evaluación incluye aspectos como el material de la obra, su tamaño, forma, peso y fragilidad. No es lo mismo embalar una escultura de mármol que un óleo sobre lienzo, y cada uno de estos elementos requiere un enfoque especializado.
Este primer paso es crucial porque nos permite seleccionar los materiales y las técnicas de embalaje más adecuadas para cada caso. Además, identificamos posibles puntos de fragilidad en la obra, como zonas que puedan ser más sensibles a los golpes, vibraciones o cambios de temperatura.
- Selección de los mejores materiales de embalaje
El embalaje es la primera línea de defensa para proteger una obra de arte durante el transporte. En EnviArte, utilizamos una combinación de materiales diseñados específicamente para las necesidades del arte. Algunos de los materiales más utilizados son:
- Papel de seda sin ácido: Ideal para envolver pinturas o superficies delicadas. Al ser libre de ácido, no daña los materiales sensibles.
- Espuma de polietileno: Amortigua golpes y vibraciones, ofreciendo una protección firme y ligera.
- Cartón corrugado y cajas personalizadas: Fabricamos cajas de madera a medida para que la obra viaje sin moverse en su interior. Además, utilizamos cartón de doble o triple capa para mayor resistencia.
- Cajas de madera: Para obras más delicadas o valiosas, utilizamos cajas de madera reforzada que ofrecen la máxima protección contra impactos y compresión. Estas cajas suelen tener un recubrimiento interno de espuma o material acolchado para evitar movimientos dentro de la caja.
El embalaje en capas
Una técnica que utilizamos con frecuencia es el embalaje en capas. Esto consiste en envolver la obra con varios tipos de protección, comenzando con los más suaves y delicados, como el papel de seda o el plástico de burbujas, y terminando con los más robustos, como el cartón corrugado o las cajas de madera. Esta combinación asegura que la obra esté protegida desde todos los ángulos y contra cualquier tipo de eventualidad.